IMPRESIONES DE UNA TORTOGA

TODOS VIVIMOS BAJO EL MISMO CIELO, PERO NO TODOS , TENEMOS EL MISMO HORIZONTE

sábado, 24 de septiembre de 2011

¡NUNCA SERÉ VENCIDA!, LA DERROTA ENCUENTRA LLAVES Y ABRE PUERTAS, (Marguerite Yourcernar, de su libro: Fuegos)

CON VUESTRO PERMISO Y SIN QUE SIRVA DE PRECEDENTE, QUIERO ESCRIBIR UNA CARTA A LA PERSONA ANÓNIMA DE LOS MIL NOMBRES Y AIRES DE MAFALDITA.




YO, NO HABLO "BIÉN" DE TÍ-¡TONTA!-NI "MAL" DE TÍ- ¡NECIA!-, HABLO "JUSTO", QUE ES DISTINTO.
(Juán Ramón Jimenez)
Premio Nobel de mi tierra
Moguer - Huelva




QUERIDA ANÓNIMA: (un poco cínico quedó el "querida", pero es un simple formulismo, una forma de encabezar las carta, que conservo todavía), TIENES UNA EXTRAÑA FORMA DE PASAR EL TIEMPO, EL INSULTO NO ES VÁLIDO PARA SATISFACERTE, SÍNO DE FORMA MOMENTÁNEA.
¿DE VERDAD TE HACE TAN FELIZ INSULTARME COBARDEMENTE, DE FORMA TAN GRATUITA Y ESCONDIDA TRÁS LA MÁSCARA DEL ANONIMATO?.
SI TIENES HIJOS Y , ES POSIBLE QUE LOS TENGAS, ¿NO SÓN SUFICIENTES PARA TÍ? ¿ÉSA ES TU FORMA DE EDUCACIÓN, ALIMENTANDO LA VENGANZA CON INSULTOS?.
Y, SI NO LOS TIENES...¿NO PUEDES OCUPAR TU TIEMPO EN TALLERES DE OCIO?. 
AQUÍ HAY MUCHOS.
LA PINTURA, POR EJEMPLO.   ¿NO TE GUSTARÍA TRABAJAR EL ESTAÑO?, ES ENTRETENIDO Y TIENE UN GENEROSO RESULTADO.
TAMBIÉN PUEDES ENSEÑAR A MANEJAR EL ORDENADOR E INTERNET, COMO VOLUNTARIA (parece que lo manejas bastante bién) GUADALINFO, QUIZÁS TE NECESITE MÁS QUE YO.
NO SÉ... SON ALGUNAS COSILLAS QUE SE ME OCURREN ACONSEJARTE PARA MATAR, LITERALMENTE, EL PRECIOSO TIEMPO QUE TAN INUTILMENTE DEDICAS A MI HUMILDE PERSONA (un poco cínico quedó, también lo de "humilde" ¿verdad?. Es una forma de escribir).
LA PRÓXIMA VEZ QUE ME CRUCE CONTIGO ¡ESCÚPEME! TAL COMO HAS PROMETIDO, NO TE CORTES, AUNQUE ESTÉS HABLANDO POR  TELÉFONO.
ARDO EN DESEOS DE DESCUBRIRTE (lo de "ardo" ha quedado un poco exagerado. Leo demasiado romanticismo ultimamente) DE PODER ESCUCHAR DE TUS LABIOS MIL REPROCHES.
SÉ QUE ME QUIERES, PORQUE ME DEDICAS TIEMPO.   ERES TÚ LA QUE NO LO SABES, PORQUE CAMUFLAS TUS SENTIMIENTOS TRAS LA MÁSCARA DEL ODIO.  
¡QUÍTATELA! Y MUÉSTRAME TU ROSTRO SIN RESERVAS.
YO NO VOY A ESCUPIRTE SÍNO ROSAS CON FORMAS DE PALABRAS.  YO, ¡TE QUIERO!, PORQUE HE APRENDIDO A PERDONAR.
ES DIFICIL OLVIDAR ¡LO SÉ!, PERO SE CONSIGUE TODO LO QUE UNA SE PROPONE. (Duele menos el estómago y se tienen menos ardores).
NO TE PIDO QUE PERDONES LO QUE YO TE HAYA HECHO PARA TENERME ESE ODIO QUE TE DÁ TAN POCAS SATISFACCIONES, SÍNO QUE PERDONES AL MUNDO Y NO LO CULPES DE TUS DESGRACIAS, PERO SOBRE TODO ¡PERDÓNATE A TÍ MISMA!.
MAFALDITA, NATI........, ANÓNIMO, LUCI: TE CONOZCO, ¡SÉ QUIÉN ERES!, PORQUE HAS COMETIDO ERRORES Y TE HE DESCUBIERTO, PERO SEGUIRÉ PASANDO POR TU LADO SIN DAR EL PRIMER PASO.   ÉSO TE CORRESPONDE A TÍ Y TUYA SERÁ LA VICTORIA.
TENGO QUE DEJARTE, MIS SEGUIDORES ME ESPERAN Y MI TIEMPO ES LIMITADO.
ÉLLOS SON IMPORTANTES PARA MÍ.





"LO MENOS FRECUENTE DE ESTE MUNDO ES VIVIR.   LA MAYORÍA...¡SÓLO EXISTE!.
                                                             (Oscar Wilde)





domingo, 18 de septiembre de 2011

EL TACO CALENDARIO DEL CORAZÓN DE JESÚS

Me piden desde la Editorial del Taco calendario, para celebrar los 125 años, que escriba mi testimonio personal sobre dicho Taco, para recopilar todos los recuerdos, que no se pierdan y crear un libro con toda la memoria colectiva.
(Se la remitiré por carta, pero antes quiero haceros partícipes de mi propio testimonio).



El primer recuerdo que tengo del Taco calendario, no es exactamente un recuerdo definido y concreto, síno como algo perteneciente a nuestras vidas, tan arraigado a nosotros como cualquier foto de un personaje de la familia fallecido prematuramente o la foto de los abuelos desaparecidos.
El Taco, siempre estuvo en la mesa despacho de mi padre, junto al tampón y la cajita de tinta, al lado de la agenda marrón "supermoderna" que se abría presionando un botoncito negro, saltando la tapa con impulso y apareciendo, de repente, todos los nombres que comenzaban por la A.
Siempre ha formado parte de nuestras vidas y quizás por éso, nunca le dí demasiada importancia.   Lo leía de vez en cuando (yo leía, todo lo que caía en mis manos).
Las hojitas que a mi padre le parecían interesantes se las guardaba.
Felicitaba a todo el mundo, tuviera el nombre que tuviera, por muy raros que fueran.
En mi segundo pueblo: AROCHE, un precioso pueblo de la maravillosa serranía de Huelva, había muchos nombres "raros" de la Biblia.
El panadero, se llamaba Asterio, el carpintero Encarnación, el vecino Trinitario y así una larga lista de Aarón, Efrén, Arístides, Casto, Toribio, Cleofé, Lot, Ester, Madai, etc.
Cuando mi padre los felicitaba se sorprendían ¿cómo sabía Antonio que era su onomástica?, si no lo sabían ni éllos mismos.    Pero Antonio tenía un truco que pocos conocían.
Dícese: el Taco calendario del Corazón de Jesús.    Donde existían TOOOODOS los nombres del mundo.
Desde los Papas hasta los confesores, pasando por vírgenes y mártires.
Cuando nos fuimos casando, mi padre no nos daba ninguna sorpresa el día de Reyes, ya sabíamos que el regalo más preciado para él era: el Taco calendario.
Y ahí... ahí fué donde yo tomé conciencia real de lo que significaba el Taco en nuestras vidas.
Ahora era solo mío y lo podía leer cuando quisiera.   Y lo leí y reflexioné y me reí.
Conocí sitios y personajes interesantes.
Cuando nació mi nieto se me ocurrió llevar la hojita a plastificar para guardarla siempre y saber,a qué hora salió el Sol y la Luna, cual era la reflexión del día, cuantos días faltaban para terminar el año, etc. y desde entonces, cada vez que nace un bebé familiar o conocido, mi primer regalo es la hojita del Taco plastificada.
Es original y lo agradecen.
Y llegó el momento del relevo, ahora soy yo la encargada de pedir, antes de Navidad y repartir en Reyes, los Tacos.
Pero mi padre, aunque, ya casi no vé, quita su hojita cada día enflaqueciendo el Taco, lo lee con la lupa cuadrada que le regale hace ya algunos años y se guarda la hojita dentro de un pequeño calendario que lleva en el bolsillito de la camisa, al lado del corazón, junto al bolígrafo con el que ya no escribe, como algo verdaderamente importante.
Sigue un ritual.
Tiene el Taco junto a la caja de los caramelos de menta y ni un milímetro se le puede cambiar de sitio.
El Taco tiene 125 años y mi padre 85, pero sigue el ritual.
Yo, tengo el mío propio, pero éso será contado en otro momento. (Como la historia interminable).